Matias Valles es posiblemente el mejor periodista balear del momento. Y rara vez se aproxima a la actualidad deportiva, pero cuando lo hace, se disfruta. Aqui ya puse varios articulos, sobre Davidson, sobre el fichaje de Figo (y su mujer) o sobre Vicente Grande. Hoy se anima en sus paginas del Diario de Mallorca a comentar sobre el partido de ayer. No os lo perdais:
Y eso que no jugó Laudrup. Por Matías Vallés
MATIAS VALLES Barcelona, Valencia y Sevilla sumaron diez goles en la jornada inicial de Liga, jugando todos ellos de visitantes. El Madrid está por estrenar, después de enfrentarse a un equipo sin propietario ni presidente. El Mallorca es una nave a la deriva que ofreció anoche una prodigiosa metamorfosis. Resurgió de sus cenizas, ante unos madridistas tan cenicientos que añoramos a Raúl. Y eso que no jugó Laudrup, el fichaje estrella de los mallorquines. Con el danés en el campo, la victoria estaba garantizada.
Florentino bufaba en el palco, y no sólo por estar rodeado de políticos socialistas. Debe tranquilizarse. Desde aquí le garantizamos que este Madrid eliminará al Alcorcón, la misión fundamental de Mourinho. Su fútbol bisutero de imitación del Barcelona también le permitirá empatar más de un partido lejos del Bernabéu, incluso ganar la mayoría en casa.
El empate ante un equipo desmantelado no obliga a los madridistas a pecar de tremendismo. Es probable que acaben la Liga en segunda posición, especialmente si se desprenden de los dos jugadores más vagos que hemos visto en un estadio, el zampabollos Benzema y el asténico Di Maria. En cuanto a Alonso, Ozil y Khedira, demasiado cerebro para tan poca gestión. Lass es una parodia de Makelele y Ronaldo goleará en citas intrascendentes ante equipos mediocres. La primera lección de Mourinho consistió en colocar todos sus millones sobre el tapete verde, para demostrar que así no se va a ninguna parte. Habrá que seguir malgastando, lástima que Beckham esté un poco arrugado.
Del Mallorca sólo puedo añadir que me obligó a presenciar la segunda parte de pie. Ayer se vivió la noche ideal para que en esta tierra fenicia floreciera el nacionalismo. Aouate jugó de Casillas y debe liberar su agenda, porque esta temporada va a ser un hombre muy ocupado. Nunes tenía que defender y rematar, De Guzmán se entonó en cuanto se cercioró de la mediocridad del rival. Y me quito el sombrero ante Nsue, fue el jugador más inteligente y habilidoso en el campo. Humilló a los defensores madridistas con el juego florido que monopolizan los barcelonistas. Y todavía quedan dos figuras por debutar, el citado Laudrup y un Miquel Angel Nadal que sería más útil galopando sobre la hierba.
La Uefa disparó al Mallorca en la pierna, y así empezó ayer la Liga, convertido en un proscrito cuyos aficionados deberían ocultar su identidad al acudir al campo. De ahí que la mejor noticia de la jornada no sea el empate de los Robin Hood del mallorquinismo en el Iberostadium, sino la primera derrota del Villarreal, en su merecido camino hacia el descenso a Segunda sobre el césped. Por supuesto, su propietario se encargará de resolver el asunto en los despachos, mediante los procedimientos habituales en ese club.