domingo, 16 de mayo de 2010

Que cerca se estuvo (Mallorca 2-0 Espanyol... Almeria 2-3 Sevilla)

Que cerca se estuvo. Pocos teníamos esperanzas de que el Sevilla se dejase el triunfo en Almería y cuando ya saboreábamos la clasificación a Champions, apenas a 40 segundos, un chaval sacado de no sé donde metió un gol imposible de chilena. Doble de rabia ante el caramelo arrancado de la boca. Cuando estuvo tan cerca…

Ayer, día de grandes ocasiones, me engalane con toda la vestimenta mallorquinista de sudadera y camiseta de la final de copa de 2003. Siempre trajo suerte. Era día grande. Hacía tiempo que no afrontábamos una última jornada con emociones en juego. Hace dos años también, pero, en el fondo todos sabíamos que Racing y Osasuna repetirían resultado que Mallorca y Zaragoza. Hoy, tampoco era optimista, pero había que lucharlo Y aun así, aplaudir a un equipo que, a malas, finalizaría quinto Chapeau.

El partido, para mí, iniciaba esperanzador cuando vi que Josemi no estaba en la convocatoria. 76 partidos después Manzano se dio cuenta. Era una señal prodigiosa. Enfrente un Espanyol, con canteranos, suplentes, Luis García que ya no es lo que era y que, pese a no bajar brazos, pocas ganas tenia de inmiscuirse en las aspiraciones del Mallorca. Pero en los primeros minutos, Kanoute puso el 0-1 en Almería y la moral del Mallorca por el suelo. Felicitar a Gol Tv que puso dos marcadores con el resultado y el minutaje de cada encuentro. Las cosas empezaban mal. Poco después, Víctor puso el 1-0 en Son Moix en una buena jugada por la izquierda y perfectamente rematada por el mallorquín. El Mallorca, cuanto menos, iba resolviendo su compromiso. Era lo mínimo.

El partido, tampoco nos engañemos, no era ninguna pasada. Y la mitad estábamos pendientes de lo que sucedía en El Mediterráneo. Y de repente, Soriano marcaba el empate al borde del descanso. En esa misma jugada Víctor remato de cabeza fuera por centímetros. En la Penya dimos saltos como locos. ¿Era posible? Al descanso estábamos en puestos de Champions. Gol Tv ponía la clasificación y el Mallorca era cuarto. ¡Que bonito! Se producían llamadas y mensajes con amigos, con gente que estaba en Son Moix, que ya no desaparecieron durante lo que quedaba de partido. Se estaba a nada de la gloria.

El principio de la segunda parte no cambió mucho. El Espanyol tuvo la pelota pero sin crear peligro. Y, de repente en Sevilla, nos decían que NEgredo hizo el segundo tanto (luego era en propia puerta de manera bastante desgraciada). El Mallorca aguantaba. Salía a la contra. El Espanyol tampoco inquietaba. Los nervios estaban presentes, porque se estaba cerca, pero sin depender de nosotros. Después Negredo fue expulsado. El Almería tenía 25 minutos contra un jugador menos. Y a partir del minuto 70, y pese a ir con 1-0, decidimos que lo importante era lo que se cocía en Almería. Entre el cambio de canales nos perdimos el gol de Mario Suarez. Bonito y nada sencillo. Que sentenciaba un encuentro que el Mallorca debía resolver.
Pero eso era secundario. Nuestra mente estaba en Almería. Nada más ponerlo había un agarrón escandaloso en el área. El árbitro se hacia el ciego. Luego hubo la jugada que nos hizo soñar, saltar, ¡creer! Ortiz se abrió desde la banda hacia el centro y sacó un disparo desde 30 metros, que pese a tocar Palop se introducía en la portería. Era el 2-2. ¡Con ese tanto el Mallorca estaba en Champions!

Durante 20 minutos animamos al Almería como locos. Tuvo ocasión de sentenciar, en varios contraataques bien llevados. Pero no lo hicieron. Y los minutos pasaban. Además el Sevilla jugaba con 10. Salió el cartelón, 4 minutos… cada vez mas nervios… y en una jugada imposible, en la que nadie quiso hacer falta, Navas centró alguien remató de medio chilena, y apareció un tal Rodri, con el 31 a la espalda para anotar de chilena un gol milagroso que arrebataba al Mallorca de la Champions. Los jugadores del Mallorca que esperaban en el césped se derrumbaron. Faltaban 40 segundos… ¡que rabia! ¡Que asco! ¡Que puta mierda!

Nada que añadir. El Sevilla ejerció de sí mismo. De ese equipo que se ha convertido en grande, pero cuya actitud es asquerosa y que genera repulsión, desprecio y asco. Que siempre se le deseará el mal haya donde juegue, desde este mismo miércoles en la final de Copa. Tras el gol salieron a insultar al banquillo del Almería, a encararse con ellos. Aunque llamasen a la hermandad andaluza antes del partido, normal que la gente del Almería les cogiese asco y les pitase en cada jugada. Es lo que merecen. Y con ellos Del Nido al frente, un señor que ya se enemistó eternamente con el Mallorca cuando dijo que la agresión de Javi Navarro a Arango, era una gilipollez.

Se acabó la temporada. El Mallorca finalizó quinto y volverá a Europa 6 años después. Sin duda una gran hazaña para un conjunto que en agosto apestaba a descenso, y que ha logrado rehacerse a todo y estar las 38 jornadas en puestos europeos. A mí me gusta y me motiva. Y sinceramente, y pese a que yo he ido necesitando un proceso de convencimiento ya que muchas veces pensé que era imposible que este equipo alcanzase Europa. Lo más bonito de este año es haber devuelto algo de ilusión, cosa que con el Mallorca es complicadísimo, cuando se ve que desaparecen todos los buenos jugadores cada verano, mientras el club se desangra económicamente. Lo bonito es creer, soñar, tener confianza. El pensar que se van a conseguir las cosas. En que el equipo sale a flote y lucha, que devuelve el esfuerzo de los aficionados. Que nos hacen creer junto a ellos. Esos minutos en Champions fueron mayúsculos. Se escaparon, si. Y da rabia ver como se fueron y lo que quedaba… pero al menos, pudimos volver a ver al Mallorca ilusionado, a la gente animando. ¡Gracias!

2 comentarios:

Legionario Blanco dijo...

"¡Que puta mierda!

Nada que añadir."

Pues eso, tú lo has dicho... encima perdemos la plaza ante un equipo que no me cae nada bien, pero bueno, la Europa League está muy bien, ha sido una temporada fantástica y aunque ese final le haya dejado un sabor amargo a la temporada, hay que estar contentos y orgullosos. Esperemos que haya algo de justicia divina y no tengamos un verano tan horrible como pinta y se soluciona de una vez el caos institucional.

Salu2

Gontxo dijo...

Totalmente de acuerdo. Es una temporada inmensa, pero ayer queda la sensacion amarga. Una pena. Un asco. A ver si al menos el verano se arreglan un poco las cosas, y el año que viene se avanza poco a poco en la europa league hasta donde se pueda y se tiene una temporada digna.