lunes, 27 de septiembre de 2010

Catedraticos y Diplomáticos

Josep Pons ha sido destituido hoy como Presidente del Mallorca. Algo normal en un hombre que desde que accedió al cargo no ha ejercido sus funciones durante dos meses, se ha especulado con su dimisión desde el principio, aunque él siempre la negó tajantemente (y así ha sido) y ha dado una ridícula imagen para un club que ya se basta el solito para eso...

Llegaba con ese aval, cada vez más absurdo, de que era Diplomatico. ¿Quien mejor para representar al Mallorca que un prohombre que ocupa tan distinguido cargo? Ni más ni menos que el Embajador de España en Austria, cargo que anteriormente ocupó en Holanda y Dinamarca, amen de otros altos cargos en instituciones españolas y europeas. Nadie reparó, ni él mismo se molestó en comentar, que el nuevo Presidente del Mallorca, ese que tenía que encargarse de la "comunicación, las relaciones institucionales y proyectar la imagen exterior del club"traía de su Embajada en Austria una denuncia por acoso sexual a una trabajadora.

Para más inri y desastre, la noticia se hizo publica el día previo a que el Mallorca conociese si disputaría la Europa League. La atención que debía estar volcada en defender lo merecido, se desvió hacia un Presidente y sus trapos sucios. Pero eso a él no le importaba. Dos meses y medio después seguía ostentando el cargo, por supuesto remunerado, pese a que no presentó futbolistas, no presentó acuerdos de colaboración o patrocinio, no concedió ruedas de prensa de carácter deportivo, no acudía a los palcos de los estadios (ni en casa ni fuera) ni a las comidas de directivas... Teníamos a un presidente que se ha embolsado el sueldo de tres meses por no hacer nada. Simplemente estar apartado... Hoy, con tres meses de retraso, Serra y la directiva se han atrevido a subsanar un error que ya empezaba a escocer.

Esta es la aportación del diplomatico. Curiosa suerte tiene el Mallorca con las profesiones más intelectuales y prestigiosas, cuando hace un año, practicamente por las mismas fechas y también previo al partido del Camp Nou, también abandonaba el Mallorca, la directiva liderada por la familia Marti Mingarro. También tenían el aval incontestable de Luis Martin Mingarro y su extraordinario curriculum (recomiendo leerlo, pero vamos, Catedrático de Hacienda Publica, decano del Colegio de Abogados de Madrid entre 1996 y 2004, Presidente de la Unión de Agrupaciones y Colegios de Abogados Iberoamericanos desde 1993 y un largo etcétera de distinciones...). Luego, resulta que entre él, su hermano, brillante empresario del grupo Safin, y su sobrino, que fue el que ejerció la voz cantante durante su mando en el Mallorca, se las ingeniaron para no pagar nada por la compra del club y de paso agenciarse 650.000 euros de la caja bermellona.

Nada mejor que ser Diplomatico o Catedrático. Cuanto bien han hecho al Mallorca. Luego nos quejamos de que existan Giles, Loperas o Vicentes Grandes... pero es que cuando vienen desde las prestigiosas procesiones hay que verlos también...

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